Cuba es blanca y negra y mestiza porque es DIVERSA
Cuba es blanca y negra y mestiza porque es DIVERSA
octubre 22, 2013
Dmitri Prieto
HAVANA TIMES — La semana pasada, en vísperas del 10 de octubre, fecha
patriótica que recuerda cómo el hacendado cubano Carlos Manuel de
Céspedes se alzó en 1868 junto con su dotación de (ex)esclavos contra el
dominio colonial español, salió por la TV cubana una Mesa Redonda con el
controversial título “Ni blanca, ni negra, Cuba es mestiza”.
En la Mesa, científicos cubanos presentaron valiosas e interesantes
evidencias de que en el conjunto de genes de nuestra población está
mezclado el ADN de África, Europa y Asia/Indoamérica, por lo cual
resulta imposible definir “razas” cubanas a partir de la genética.
Pero también promovieron, a partir de ese certero punto, otro -a mi modo
de ver- peligrosamente dudoso: de que Cuba “es mestiza”.
Al otro día, el Noticiero del Mediodía entrevistó a la cantante Eme
Alfonso, quien está promoviendo en un club de Miramar [link a mi viejo
post sobre Miramar] un proyecto artístico centrado en el mestizaje. [NO
TRADUCIR mestizaje COMO MISCEGENATION O COMO RAYOS SE ESCRIBE!!!]
Me preocupan de sobremanera tales hechos.
Sin dudas, genéticamente casi toda la humanidad es mestiza, quizás con
la exclusión de algunas poblaciones endogámicas aisladas… Sin dudas, en
el sentido más íntimo de la biología y la dignidad humana “NO HAY
RAZAS”, como ya dijo José Martí, tesis que para
de Cuba (entre quienes me incluyo) es “una verdad de Perogrullo”.
Sin duda, cada integrante de la familia humana debe tener los mismos
derechos que cualquier otr@, independientemente del color de la piel, etc.
Pero la forma en que se plantea el tópico es muy peligrosa. Ya la
mayoría de los pueblos de Nuestra América abandonaron el gesto de
fundamentar su existencia nacional en el mestizaje. Es triste que a
estas horas propagandistas de Cuba pretendan enarbolar una tesis
reconocida universalmente como fallida.
Y es que decir que Cuba “no es blanca ni negra” excluye a quienes
culturalmente se ven a sí mismos/as o son vistos/as por otros/as como
personas blancos/as o negros/as. La clasificación por colores de la piel
y “racialidades” es un hecho cultural. No podemos darnos el lujo de
coagular la “identidad nacional” con una sóla identidad de color o “raza”.
Lamento mucho por el interesante trabajo que hace Eme Alfonso, pero el
hecho de que en Cuba haya canarios, haitianos, cristianos ortodoxos,
judíos, afro-jamaicanos, gallegos y practicantes de la religión Yoruba
no es síntoma de mestizaje sino de DIVERSIDAD socio-cultural. Y ese es
el término correcto.
Porque nadie es una mezcla de todos los colores y culturas, pero es
conveniente y correcto que en medio de la mezcla e hibridez SOCIAL nadie
se sienta excluido/a o discriminado/a a causa de su color o cultura.
Quienes se consideran “mestizos/as” no deben tener más derechos que
quienes no.
Contrariamente, el “fundamentalismo” de “Cuba=mestiza” excluye a quienes
no se sienten como tales. Por ello se trata de un hecho muy negativo que
se esté dando promoción a esa suerte de “ideología”.
No sé qué fuerzas pueden estar detrás de la nueva consigna. Pero sí sé
(y me lamento mucho, a propósito de la Mesa Redonda) que deducir hechos
culturales directamente de los biológicos ha sido uno de los rasgos más
macabros de la cosmovisión genocida del nazismo.
Una Cuba DIVERSA donde sin dominaciones quepamos todos/as, es mi más
preciado sueño para mi tierra.
Source: “Cuba es blanca y negra y mestiza porque es DIVERSA – Havana
Times en español” – http://www.havanatimes.org/sp/?p=91384
En efecto, creo que diversidad es la palabra de orden. Para la mayoría de los cubanos, yo soy un mulato claro y nada más. Sin embargo, yo no me considero tal. Me sé y me siento múltiplemente mestizo. Nací en Santiago de Cuba y, además de sangre europea y africana, por mis venas corre sangre indocubana (hecho comprobado fehacientemente mediante documentos censales y parroquiales que se remontan al siglo XVII); y, por si fuera poco, tengo también sangre mexicana. A mi juicio cada identidad particular tiene derecho a existir, en un plano de equidad, junto a toda las demás identidades. Esa diversidad sin privilegios enriquece a la nación y garantiza el equilibrio de todos sus polícromos componentes. Tampoco hay una sola manera de ser cubano, y todas las existentes son igual de válidas. La manera de ser cubano de Carpentier no era la misma que la de Lezama Lima.