Todos cabemos. Programa Mínimo de la Mesa de Unidad de Acción
Todos cabemos. Programa Mínimo de la Mesa de Unidad de Acción Democrática
DDC | La Habana | 12 Mayo 2016 – 4:44 pm.
La Mesa de Unidad de Acción Democrática (MUAD) es una coalición de
organizaciones, agrupaciones y personas políticas que, manteniendo sus
específicas identidades, coinciden en su interés por democratizar el
sistema político cubano por medios pacíficos y democráticos para un
nuevo proyecto de nación inclusivo. La MUAD favorece el diálogo, la
reforma legal, la negociación y la acción cívica no violenta, sin
enfrentamientos, pero con una saludable confrontación de criterios; así
como la gobernanza y la gobernabilidad democráticas fundadas en las
buenas prácticas públicas.
En la MUAD trabajamos desde una realidad: el modelo político-económico y
social que se ha impuesto en Cuba en nombre del socialismo ha traído, en
lugar de prosperidad, más pobreza generalizada y un enorme retraso a los
cubanos; ha dividido el país y a las familias, ha creado discriminación
y exclusión y ha concentrado las riquezas, los recursos, la economía en
general y las decisiones políticas en pocas manos.
A partir de esta realidad, y para superarla, la MUAD se propone
trabajar, desde abajo, con los ciudadanos en un nuevo proyecto de
prosperidad, libertad, dignidad y bienestar construido por todos y en el
que quepamos todos, buscando el acceso al poder a través de dos vías
fundamentales: las propuestas de reformas legales y constitucionales
específicas propuestas y/o respaldadas por los ciudadanos, y la
presentación de candidatos a todos los niveles de gobierno electivos por
parte de los ciudadanos y de las organizaciones que así lo consideren;
asociadas a la combinación compartida de las distintas estrategias,
experiencias y tácticas pacíficas de las diversas alternativas que la
conforman.
Son nuestros principios y objetivos generales:
1- Establecer un diálogo nacional inclusivo que promueva y facilite la
aplicación de los derechos reconocidos en los Pactos Internacionales,
recogidos en la Carta Internacional de Derechos Humanos, incluyendo los
de la Organización Internacional del Trabajo. Los derechos humanos,
indivisibles e integrales, deben ser la fuente primaria de la
Constitución y la ley en Cuba. En tal sentido consideramos que la
liberación de todos los prisioneros políticos y de conciencia, así como
la de aquellos injustamente encarcelados, es un imperativo para el
presente y futuro de los derechos humanos.
2- Trabajar por un Estado social y democrático de derecho, fundado en
las libertades fundamentales, en la soberanía de los ciudadanos como
fuente básica del poder y en la participación ciudadana en todos los
temas esenciales del gobierno y del Estado. El eje que nace de la
ciudadanía, transita por el Estado de derecho y culmina en la ley debe
ser la base del tipo de Estado en Cuba.
3- Favorecer una economía social de mercado en la que quepan todas las
formas de producción modernas, que no promuevan la esclavitud y que
impidan toda forma de monopolio. Una economía del bienestar que
garantice el acceso a la creación y disfrute democráticos de la riqueza
a todos los ciudadanos sin distinción ni discriminación debe ser
política de Estado.
4- Promover y apoyar la libre sindicalización de los trabajadores, así
como el fortalecimiento de las clases medias. El derecho de los
trabajadores a formar sindicatos independientes y a participar junto con
el gobierno y los empresarios en las decisiones de políticas sociales
son las garantías fundamentales para asegurar la equidad y la justicia
distributivas en las sociedades modernas. También, defender la libertad
para elegir su empleo en condiciones equitativas y satisfactorias, con
posibilidades de negociar directamente sus contratos y el pago de su
labor. Del mismo modo, lograr la existencia de clases medias fuertes y
extendidas es la muestra de la democratización progresiva de la economía.
5- Eliminar cualquier forma y tipo de discriminación y de exclusión
política, religiosa, cultural o social. El reconocimiento pleno y sin
tutelas a la diversidad y pluralidad de la sociedad cubana es la base
para debilitar toda forma de discriminación y la fuente para garantizar
que la forma de gobierno y de Estado en Cuba responda y se identifique
con su sociedad.
6- Priorizar el cuidado del medio ambiente, el respeto y desarrollo de
la biodiversidad y de los ecosistemas. Sin medio ambiente protegido no
existen ni economía ni sociedad sostenibles.
7- Reconocer a la diáspora cubana como parte de la nación, recabar su
cooperación en la construcción del nuevo país que anhelamos y asumir
todos sus derechos y deberes ciudadanos.
8- Trabajar por una política internacional basada en el respeto al
derecho internacional y a los derechos humanos, a la paz, la amistad y
la cooperación con todos los pueblos y gobiernos del mundo y en la
solución de los conflictos internacionales por vía pacífica. El apego al
derecho internacional y la promoción de un clima de paz son fortalezas
para todos los países. El derecho internacional y la paz, sin embargo,
tienen una estrecha relación con el apego al Estado de derecho y con la
promoción y respeto a los derechos humanos dentro de cada país. Promover
las libertades fundamentales y los derechos humanos por todo el mundo
debe ser política de Estado en Cuba, como la mejor vía para fortalecer
el derecho internacional y la paz mundial.
A partir de aquí definimos los ocho ejes del Programa Mínimo de la MUAD.
—Primer eje: Trabajar en las iniciativas en curso ―gradualmente
diseñadas y centrada en los ciudadanos― de reforma al sistema electoral
y a la ley de asociaciones, junto a la consulta popular, como vías para
la legítima participación ciudadana plural en los órganos de poder tanto
local como nacional, a través de elecciones libres, plurales, justas y
competitivas. En este sentido promoveremos una reforma del Artículo 5 de
la Constitución como base del reconocimiento legal al pluralismo
político de la sociedad cubana. La fuerza de la nación cubana, hoy
fragmentada por el mundo, depende de la fuerte y armónica convivencia de
toda su pluralidad.
—Segundo eje: Elaborar una ley de propiedad, asociada a una reforma en
la estructura económica del país, que reconozca todas sus formas y el
derecho de los cubanos a la propiedad en toda su diversidad, sobre sus
frutos, y a la inversión en la economía, garantizando la seguridad
jurídica sobre la propiedad. Estimular el desarrollo de la pequeña y
mediana empresas, privada o asociada, como base estructural de la
economía, e impulsar el crecimiento de las clases medias es fundamental
para la creación de empleos y la reducción de la desigualdad. La riqueza
de un país se verifica en la riqueza de sus ciudadanos.
—Tercer eje: Trabajar en una ley rigurosa contra todas las formas de
discriminación, que proteja a las minorías y que promueva y garantice la
participación paritaria de los diferentes sectores sociales en la
sociedad, fundamentalmente aquellos históricamente discriminados. La
tolerancia, el respeto y la convivencia ética dependen del trato igual a
todas las diversidades y sectores de la sociedad.
—Cuarto eje: Trabajar en una ley Afirmativa de estímulo a la juventud
que proteja y estimule sus intereses y su participación en la sociedad.
Este es un asunto de seguridad nacional. La constante emigración de los
jóvenes no solo es una derrota del modelo de país, sino que compromete
su futuro. El desarrollo de la economía del conocimiento y de las nuevas
tecnologías está vinculado al estímulo creador y emprendedor de la
juventud. Para ello promoveremos la eliminación del Servicio Militar
Obligatorio. La continuidad de Cuba como nación requiere detener la
hemorragia migratoria, y del desarrollo de la economía del conocimiento.
—Quinto eje: Trabajar en una ley de protección especial para la tercera
y cuarta edad. Cuba es un país envejecido y a la vez un país que se
empobrece. Las personas de la tercera y cuarta edad son las que cuentan
con menos recursos y las que han perdido los mecanismos de protección
social con que contaban hasta hace unos años. Contra ellas se establece
ya un patrón de discriminación generacional, fortalecido con recientes
resoluciones del Partido Comunista de Cuba (PCC). La precariedad en el
valor del dinero, sumado a los altos precios en productos básicos de por
sí deficitarios, viene alimentando la indigencia en estos sectores y el
incremento en los índices de pobreza. Un país que incrementa
progresivamente su esperanza de vida necesita políticas consistentes
dirigidas a estos sectores.
—Sexto eje: Trabajar en las propuestas de reformas a la Ley Laboral
desarrolladas por los grupos sindicales independientes, dentro y fuera
de Cuba. Estas propuestas son urgentes. Son necesarias: la
liberalización del sector laboral, de modo que los trabajadores cubanos
puedan desplegar sus capacidades en cualquier esfera de la economía sin
restricciones; la eliminación de la Unidad Empleadora, a través de la
cual el gobierno regula la relación empleado-empleador; y la autonomía y
fortalecimiento de los sindicatos para que los trabajadores pueden
defender sus intereses y necesidades. El respeto a la dignidad del
trabajador cubano es un imperativo nacional.
—Séptimo eje: Una Ley de estímulo a la Educación, al Deporte y a la
Cultura. Estos son ámbitos que requieren de reformas urgentes y
modernizadoras que estimulen a quienes se dedican a fomentarlos.
Autonomizar y liberalizar estos sectores son pasos necesarios para
recuperar nuestro lugar y colocarnos al nivel del desarrollo mundial
tanto en términos de conocimiento como de desarrollo. La debilidad de la
cultura y el atraso en los niveles de conocimiento en Cuba nos
imposibilitan para hacer frente a las sucesivas avalanchas de la cultura
de masas predominante.
—Octavo eje: Avanzar hacia una legislación que garantice el libre
tránsito como derecho ciudadano y restituya a los cubanos emigrados
todos sus derechos civiles, políticos; económicos, sociales y
culturales. Como nación, necesitamos reconstruirnos a partir de la
fragmentación global de nuestra nacionalidad. Este es otro imperativo
del nuevo proyecto de nación cubana.
Junto a estos ocho ejes de acción, la MUAD desarrollará también acciones
y programas sociales específicos que puedan atender necesidades
impostergables para los sectores más vulnerables, y apoyará los que ya
desarrollan algunas de sus organizaciones integrantes.
En la MUAD creemos en la necesidad de un nuevo contrato social. Son
esenciales para él la reforma del Estado y un nuevo concepto de
legitimación que recupere el lugar central de los ciudadanos como ejes
del proceso político, basado en la transparencia institucional.
Esto requiere dar un vuelco a los criterios de legitimación
predominantes en Cuba. Durante más de 50 años se ha pretendido imponer
que la legitimidad proviene del Estado y del Partido Comunista de Cuba,
otorgada por estos a los ciudadanos, quienes no son considerados como la
fuente del gobierno y del Estado sino sus derivados.
Pero para la MUAD no se trata de refundar cualquier Estado. Creemos en
la necesidad de construir un Estado con claras reglas del juego y de la
convivencia tanto para gobernantes como para gobernados. La MUAD es
esto: la política desde y para los ciudadanos.
Solo así todos cabemos.
Dado en La Habana, a los 9 días del mes de mayo de 2016
Adhesiones:
José Daniel Ferrer, Unión Patriótica de Cuba (Grupo de los 75)
Guillermo Fariñas, Frente Antitotalitario Unido (Premio Sajarov)
Félix Navarro, Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel (Grupo de los 75)
Elizardo Sánchez, Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación
Nacional
Librado Linares, Movimiento Cubano Reflexión (Grupo de los 75)
Jorge Olivera, Club de Escritores de Cuba (Grupo de los 75)
Félix Díaz (Grupo de los 75 )
Fernando Palacio, Partido Solidaridad Liberal Cubano
Eroises González, Plataforma femenina Nuevo País
Carlos Miyares, Fundación Sucesores
Eliecer Ávila, Movimiento Somos Más
Arturo Rojas, Unión Social Comunitaria
Roberto Díaz, Centro de Apoyo a la Transición
Nancy Alfaya, Red Mujeres por la Igualdad
Juan. A Madrazo, Comité Ciudadanos por la Integración Racial
Nelson Álvarez, Afromás
José Cáceres, Frente Juvenil del Frente Antitotalitario Unido
Rolando Ferrer, Las Villas Ley
Kirenia Nuñez, Mesa de Diálogo de la Juventud
Maria Elena Mir, Confederación Obrera Nacional Independiente de Cuba
Víctor Domínguez, Grupo Social por la Responsabilidad Corporativa
Zuleydis L. Velázquez, Cuba Independiente y Democrática
Manuel Cuesta, Arco Progresista
José A. Álvarez, Cuba Exige
César I. Mendoza, Centro de Estudios para el Desarrollo Local
Yureisy Delgado, Movimiento Derechos del Pueblo
Aida Valdés, Coordinadora Nacional de Presos y Ex presos Políticos
Yelkis Puig, Consejería Jurídica y de Instrucción Cívica
Ada López, Red de Bibliotecas Cívicas
Alberto de la Nuez, Movimiento Ciudadano Reflexión y Reconciliación
José Díaz, Movimiento Opositores por una Nueva República
Boris González, Periodista Independiente/ Activista Político
Tania Bruguera, Artista/ Instituto de Artivismo Hannah Arendt
Vladimiro Roca, Partido Socialdemócrata de Cuba
Roberto Jiménez, Juventud Activa Cuba Unida
Hildebrando Chaviano, Centro para el Análisis de Políticas Públicas
Elena Larrinaga, Observatorio Cubano de Derechos Humanos
Alejandro González, Observatorio Cubano de Derechos Humanos
Berta Bueno, Observatorio Cubano de Derechos Humanos
Alina Brower, Músico/ Activista Político (EE.UU)
Juan Francés, Solidaridad de Trabajadores Cubanos
Siro del Castillo, Solidaridad de Trabajadores Cubanos (EE.UU)
Marifeli Pérez-Stable, Profesora Universitaria (EE.UU)
Oscar Peña, Comité Cubano Pro Derechos Humanos (EE.UU
Yaxis Cires, Partido Demócrata Cristiano (Panamá)
René Hernández, Iniciativa Cultural para la Democracia Participativa (EE.UU)
Gerardo Martínez, Democracia Participativa
Haroldo Dilla, Profesor Universitario (Chile)
Marlene Azor, Socióloga (México)
Armando Chaguaceda, Profesor Universitario (México)
Arnoldo Muller, Coordinadora Socialdemócrata (EE.UU)
Pedro R. López, Ingeniero (República Dominicana)
Tomás Rodríguez, Agenda Cuba (EE.UU)
Juan F. Monzón, Partido Demócrata Martiano (EE.UU)
Fernando L. González, Profesor Universitario (Brasil)
Ramón S. Sánchez, Movimiento Democracia (EE.UU)
*Este es un primer listado de adhesiones a Todos Cabemos. La lista será
actualizada en la medida en que otras organizaciones y actores públicos
se vayan adhiriendo.
Source: Todos cabemos. Programa Mínimo de la Mesa de Unidad de Acción
Democrática | Diario de Cuba –
www.diariodecuba.com/cuba/1463067863_22315.html
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